Dividido en cinco etapas, el proyecto Santa Margarita contempla la construcción de más de 220 viviendas en el sector El Tabito. Como una forma de conectar las etapas uno y dos, separadas por una quebrada, las faenas llevaron a cabo la construcción de un camino, arrasando una importante área cubierta con especies nativas de alto valor biológico. Este hecho, constatado por personal del Departamento de Medio Ambiente comunal, generó una denuncia por parte del municipio ante CONAF en contra de la constructora Reyes y Reyes, empresa a cargo de las obras.
En rigor, las especies eliminadas corresponden a formaciones xerofíticas (de escasa demanda hídrica), tales como quisquito, chagual -especies protegidas mediante Decreto Supremo 41/2011 del Ministerio del Medio Ambiente-, colliguay, capachito y hierba de la piñada.
El proyecto se levanta en terrenos propiedad de Humberto Garetto, empresario ya denunciado por CONAF en 2019 por la intervención y corta ilegal de bosque nativo de preservación, daño ambiental producido por las maniobras de extracción de áridos en el sector, actividad -también ilegal- que lo liga con Emilio Jorquera y que le significó la destitución como alcalde a este último en febrero de este año.