Del antipoema al trap: la calle se toma la palabra

Género urbano ¿la nueva antipoesía?

poesía y género urbano
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¿Puede el trap ser poesía? ¿Qué tienen en común Pailita y Nicanor Parra? En este provocativo ensayo se exploran los vínculos entre el género urbano y la tradición poética y antipoética de Chile. A través de un recorrido que va desde las vanguardias hasta las batallas de freestyle, el autor argumenta que expresiones como el rap y el trap, lejos de ser una degradación del arte, actualizan el espíritu rupturista y callejero de la antipoesía en el siglo XXI. Una reflexión imprescindible para entender las derivas de la lírica chilena en tiempos de globalización y revuelta.
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La historia de la poesía chilena está marcada por una serie de rupturas, provocaciones y vanguardias, que siempre han dado origen a discusiones generacionales con respecto a qué es y qué no es poesía, mucho más allá del género literario. Desde el creacionismo de Vicente Huidobro hasta la antipoesía de Nicanor Parra, los poetas han buscado desafiar las convenciones para ser carne y voz de lo que pasa y está por venir. Hoy, esa tradición rupturista encuentra nuevas expresiones en dos fenómenos del llamado «género urbano»: la música urbana (trap, reggaetón, hip-hop) y las competencias de freestyle (poetry slam), porque aunque distintos, ambos comparten con la antipoesía una voluntad de subvertir el lenguaje y los cánones establecidos.

La antipoesía como precursora

Como señala el destacado ensayista y académico, Leonidas Morales, el «Manifiesto» de Nicanor Parra resulta en una verdadera profecía: «los poetas bajaron del Olimpo» para hablar el lenguaje de la calle. Medio siglo después, los exponentes del trap y el freestyle llevan esa premisa al extremo, haciendo de la jerga urbana su materia prima expresiva1.

La conexión de la antipoesía con el género urbano se manifiesta en el usó del castellano chileno coloquial como un arma provocadora, con toda su carga humorística y crítica2. De esa manera, y salvando las distancias, los exponentes urbanos hacen algo similar. Las batallas de freestyle, por ejemplo, tienen ecos de la irreverencia parriana 3, mientras que las letras del trap, aunque a veces superficiales, «chasconean» también los cánones del «buen decir» poético. Por eso, más que una degradación en sí mismas, estas expresiones representarían un reflejo del incomprendido espíritu de la época, una «poesía de la calle», tal como Parra lúcidamente anticipó.

Del antipoema al beat

La música urbana en Chile tiene su origen en el rap y el hip-hop que llegaron al país en los años 80. Como documentan el investigador Pedro Poch 4 y la cantante AnaTijoux 5, estos géneros nacieron como una expresión de protesta callejera, donde el decir poético emerge no desde la página en blanco sino desde la experiencia directa de las poblaciones chilenas. En sus inicios, grupos como Panteras Negras y Los Marginales transformaron la denuncia de la pobreza, la violencia policial y la marginalidad post-dictadura en un nuevo lenguaje artístico (³).

Ya en los 2000, de la mano del auge global del hip-hop, el rap chileno se diversifica y surgen nuevas vertientes como el freestyle, que pone el foco en la competencia de ingenio e improvisación 6, mientras exponentes como Guerrillerokulto y Portavoz, y bandas como Tiro de Gracia, acercan el rap a públicos más amplios y lo consolidan como la voz de una generación (²).

La década de 2010 marca otro punto de inflexión con la irrupción del trap, un estilo que fusiona la base rítmica del rap con influencias del reggaetón y la música electrónica. Como señala Tijoux 7, el trap chileno desarrolla su propio decir poético a través de figuras como Pablo Chill-E, Princesa Alba y Gianluca, caracterizándose por un sonido crudo y minimalista, y letras que oscilan entre el hedonismo y la crítica social, siempre desde un lenguaje directo y callejero.

Voces de la calle

Desde los inicios del hip-hop en los 80 hasta el auge del trap en los 2010, el género urbano en Chile ha sido un espacio de innovación lírica y contestación social, donde el decir poético emerge directamente de la experiencia callejera8. Exponentes como Portavoz en el rap 9, Pailita en el trap 10 11 y Kaiser, Teorema y ahora último El Menor en el freestyle (⁷), por mencionar solo algunos, han convertido la calle en su «academia». Así, sus letras son tanto crónicas de la marginalidad urbana como manifiestos generacionales. Los barrios y poblaciones que retratan son el nuevo «Olimpo al revés» de una poesía irreverente, sin permiso, e incluso sabrosona.

Si Parra usó el antipoema para criticar el establishment cultural, los exponentes del género urbano en Chile de alguna manera también hacen lo mismo. Mientras el rap suele tener una dimensión explícitamente más contestataria (9), el trap a menudo opera por la vía del «chasconeo» 12, usando un lenguaje ultra-coloquial y a veces crudo para burlarse de las convenciones del «buen decir» poético. Ambos estilos, a su manera, encarnan una democratización radical de la palabra y la expresión artística.

Fenómeno de masas

A diferencia de la poesía tradicional, que le cuesta convocar y lleva siglos siendo cultivada de la misma manera, los nuevos canales digitales, como YouTube y Spotify (¹³), han amplificado la estas formas urbanas del decir poético, llevándolas a audiencias masivas sin ningún tipo de precedentes. El caso de Cris MJ, cuyo tema «Una noche en Medellín» alcanzó 503 millones de reproducciones en 2022 13, ejemplifica cómo estas expresiones, nacidas en los márgenes, han logrado permear todas las capas sociales. Al igual que la antipoesía en su momento, el género urbano aestá abriendo espacios para voces y realidades históricamente marginadas de la «alta cultura», pero su alcance masivo sugiere una democratización del decir poético aún más radical que la que Parra pudo imaginar.

Conclusión

Más que una negación de la poesía tradicional, el hip-hop, el trap y el freestyle chileno representan una renovación del gesto antipoético chileno en el siglo XXI, que desafía no sólo prejuicios estéticos y de contenido, sino también barreras sociales. Lo que comenzó con Parra como una democratización del lenguaje poético ha evolucionado hasta convertirse en una forma de arte que nace directamente de la experiencia urbana. Un decir poético que no pide permiso para existir, que hace de la calle su página en blanco y del beat su métrica. Una nueva voz para viejos dilemas, que Parra sin duda, al menos, hubiera estado muy interesado en desmenuzar.

Nicanor Parra: «El poeta y la muerte»
(tal vez el primer trap)

A la casa del poeta
llega la muerte borracha
ábreme viejo que ando
buscando una oveja guacha

Estoy enfermo - después
perdóname vieja lacha

Ábreme viejo cabrón
¿o vai a mohtrar I'hilacha?
por muy enfermo quehtí
teníh quiafilame I'hacha

Déjame morir tranquilo
te digo vieja vizcacha

Mira viejo dehgraciao
bigoteh e cucaracha
anteh de morir teníh
quechame tu güena cacha

La puerta se abrió de golpe:
Ya - pasa vieja cufufa
ella que se le empelota
y el viejo que se lo enchufa

Referencias:

  1. Morales, Leonidas (2012). «La antipoesía de Parra: una revolución incómoda». Santiago: Editorial Universitaria. ↩︎
  2. Schopf, Federico (2000). «De las vanguardias a la antipoesía». Santiago: LOM Ediciones. ↩︎
  3. Kaiser vs Teorema (2020). «Batalla de Gallos Regional Santiago». https://www.youtube.com/watch?v=noWvtfFO1UY ↩︎
  4. Poch, Pedro, ed. (2021). «Palabra Urbana: historia del hip-hop en Chile». Santiago: Editorial Cuarto Propio. ↩︎
  5. Tijoux, Ana (2014). «El rap como contragolpe». Le Monde Diplomatique, edición chilena. ↩︎
  6. Garretón, Manuel Antonio (2017). «Las batallas culturales del siglo XXI». Santiago: Catalonia. ↩︎
  7. Tijoux, Ana (2019). «Trap y política en el Chile actual». Le Monde Diplomatique, edición chilena. ↩︎
  8. Poch, Pedro (2020). «El rap chileno como poesía popular». Revista Chilena de Literatura, 97, 259-284.
    ↩︎
  9. Subverso & Portavoz «Donde Empieza la Violencia». https://www.youtube.com/watch?v=8dWK5xmAbHc ↩︎
  10. Pailita (2022). «Dime Tú». https://open.spotify.com/intl-es/album/5RdU0FElotMIDYbY8zKiHx ↩︎
  11. Felipe Retamala (2022) La Tercera (Pailita, la estrella inesperada del trap chileno: “Es una locura, porque no puedo estar tranquilo, es difícil” https://www.latercera.com/culto/2022/06/04/pailita-la-estrella-inesperada-del-trap-chileno-es-una-locura-porque-no-puedo-estar-tranquilo-es-dificil/# ↩︎
  12. Polimá Westcoast (2021). «My Blood». En CHI. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=bRMHBDOhxyc ↩︎
  13. Leiva, Jorge (2023) Ciper Chile. ««Urbanos»: No sólo se trata de música (ni de ‘likes’)». https://www.ciperchile.cl/2023/01/25/urbanos-no-solo-se-trata-de-musica/ ↩︎

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Jaime Gómez Rogers (Jonás)

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