Muchos hablan y teorizan con grandilocuencia sobre las razones que explican la fractura social que se manifestó con tanta fuerza el 18/0 y que todavía, tras más de dos semanas, no encuentra sosiego.
Sin embargo, poco se oye de las posibles y concretas soluciones. En ese sentido me gustaría que nos centráramos en las medidas que están a nuestro alcance, en cada uno de nosotros, y que apelan a cambios de hábitos.
Muchas de ellas las podemos empezar a hacer ya, como reciclar, comprar en el almacén de la esquina, matricular a nuestros hijos en los colegios públicos, cotizar en Fonasa, descentralizar Chile.
Sé el cambio
Hay que forzar a que el Estado, con nuestra plata y nuestros impuestos, sin corrupción en las policías, sin evasión de impuestos, financie las garantías básicas que nos ubicarían en la verdadera vía hacia el desarrollo.
Soy un convencido que de alguna manera la verdadera revolución de este movimiento colectivo, parte desde un cambio individual .
¿Qué nos impide financiar la educación que queremos para todos, la salud que soñamos para todos? De alguna manera necesitamos perder ese miedo que nos hace entrar en la lógica de pagar por privilegios.
Éxodo
Antes de terminar me gustaría insertar una idea, que es la del ÉXODO, es decir, salir de Santiago a desarrollar otras regiones.
Sinceramente, no creo que la Capital tenga arreglo, porque para solucionar la desigualdad tendríamos que mezclar a La Dehesa con La Pintana o Chicureo con Puente de Alto… ¿Imposible verdad? la desigualdad está segmentada. Santiago se vició.
Revolución digital
La Revolución Industrial significó que abandonáramos el campo para atiborrar las ciudades y producir en las fábricas.
Hoy la Revolución Digital exige todo lo contrario, es decir, el éxodo de Santiago, la vuelta al campo, la montaña, la playa. Para crear emprendimientos, nichos económicos de especialidad. Para que naturalmente se generen nuevos canales de distribución y transporte, llámense carreteras y trenes.
Para inaugurar nuevos colegios, nuevos hospitales… Para diseñar ciudades con barrios diversos, en los cuales nos encontremos todos, más allá de las condiciones socioeconómicas de cada uno.
Discurso realizado por Alberto Gulppiz el domingo 3 de noviembre de 2019, en el frontis del Museo de Bellas Artes, con motivo del conversatorio «Coloquio de Perros», evento organizado por el colectivo Tres Tristes Tigres.