Caleidoscopio invertido

Caleidoscopio invertido
Si pudiéramos mirar cada hormiga niño / pero somos enormes / consumimos y nos consumen / devoramos con morboso afán / cada sombra que da un árbol
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Aprovecha niño

de beber agua mientras quede

que nosotros los adultos la consumiremos

y junto a cada gota se irá la risa que alguna vez tuvimos

los que andamos de hoja en hoja

buscando…

Bebe ahora porque somos crueles

y más que crueles

indiferentes

Si pudiéramos mirar cada hormiga niño

pero somos enormes

consumimos y nos consumen

devoramos con morboso afán

cada sombra que da un árbol

Somos solo animales que persiguen su cola

y tú también serás uno si no detenemos este juego

en que todos quedan sin cabeza

Somos solo niños niño

Te pido perdón por lo que estamos haciendo

el mono nunca debió bajar del árbol

Te pido perdón por aquello que solo verás en fotografías

perdón porque si no detenemos este juego

será nuestra culpa

y de nadie más

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OTRAS DOSIS DE Antítesis

"Comencé a escribir hace dieciocho años. Tengo setenta. Antes de eso escribía cartas y lo sigo haciendo, pero correos electrónicos. He asistido a varios talleres literarios. En los talleres hay lectores, escuchas y afinas el oído, se recomiendan lecturas y hay un profesor o profesora que enseña. Además te obliga a escribir, a cerrar los relatos que en mi caso muchas veces quedan a medio camino".
A cinco años de la partida terrenal de Nicanor, el destacado artista y escritor algarrobino, Pablo Salinas, rememora algunos de sus encuentros litoraleños con el antipoeta y de paso demanda, ya una vez superada la "excitación del ambiente" -dice-, el aterrizaje cultural definitivo del vecino Parra, el real... en definitiva se pregunta: ¿Cuándo baja del Olimpo?
Ganador del VII Premio Hispanoamericano de Poesía de San Salvador, El Salvador; del XXII Premio de Poesía Vicente Núñez, Córdoba, España; del I Premio de Poesía Carlos Oroza, Vigo, España. En Chile, también en los últimos meses, ganador del Aristóteles España de Castro, del Stella Corvalán en Talca. Atesora con frenético orgullo un segundo lugar en el Concurso de Poesía de El Quisco. Con los jurados santiaguinos le ha ido pésimo.