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María José Domínguez, nueva directora ejecutiva de Fundación Kennedy: “Lo más importante es abrir canales de participación ciudadana, no solo de consulta”

Hace pocos días, este cargo quedó en manos de María José Domínguez, joven arquitecta de la Universidad Católica de Valparaíso, quien entre 2017 y 2019 se desempeñó como directora de construcción y emergencias de la Fundación Techo-Chile.
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En lo referente a la puesta en valor y resguardo de humedales, la Fundación Kennedy es pionera a nivel nacional. También líder. Desde su creación hace 16 años, no había conocido en su conducción ejecutiva más que a su fundador, el inglés avecindado en Chile Peter Kennedy. Hace pocos días, este cargo quedó en manos de María José Domínguez, joven arquitecta de la Universidad Católica de Valparaíso, quien entre 2017 y 2019 se desempeñó como directora de construcción y emergencias de la Fundación Techo-Chile.

Hoy conversamos con María José, ante esta nueva etapa que se inicia para esta importante ONG del ámbito ambiental nacional.

-La Fundación Kennedy nace en 2004, cuando muy pocos en Chile tenían verdadera noción del valor e importancia de los humedales. Tras una década y media, la situación ha cambiado radicalmente y, se podría decir, los humedales son percibidos hoy por la ciudadanía como uno de los ecosistemas relevantes y reconocidos. ¿Cómo enfrentas el desafío de ponerte a la cabeza de la conducción ejecutiva de la organización pionera en Chile en un ámbito en pleno crecimiento?   

Es un gran desafío que tomo con mucha responsabilidad. La fundación tiene ya un largo recorrido y hoy nos enfrentamos a un escenario cambiante que en algunos aspectos nos facilita el trabajo y en otros nos presenta nuevos desafíos. El creciente interés de la ciudadanía por los humedales y su protección es una gran noticia, pero también exige a todos quienes participamos de la conservación una nueva forma de abordarla. Hoy existen nuevas organizaciones de defensa del medioambiente y el patrimonio, una mayor demanda hacia las instituciones responsables del cuidado de los humedales y hacia las empresas que tienen impacto sobre ellos, y sobre todo una búsqueda constante de espacios de participación por parte de las comunidades.  

En este contexto, nos hemos planteado dos desafíos. Primero, queremos exponer la realidad que vemos en terreno, las necesidades y requerimientos de las comunidades y de los ecosistemas. Segundo, no perder de vista que en nuestro país hay más de 40.000 humedales, altamente amenazados y desapareciendo día a día. Hoy, nosotros, el gobierno o las comunidades, no podemos protegerlos de forma independiente, se requiere de coordinación para dar esta cobertura. En este sentido, Peter Kennedy lleva muchos años relevando la importancia del trabajo con la comunidad. Hoy, desde la fundación creemos que la mejor fórmula para lograrlo es confiar más en la capacidad de las comunidades para gestionar sus propios territorios, abrir espacios para su participación y democratizar el acceso a información y herramientas para que entre todos y todas podamos hacer frente a este gran desafío. Es una meta ambiciosa y de largo aliento que nos hemos propuesto tomar y aportar desde nuestro rol. 

-A tu modo de ver, ¿cuáles son las tareas respecto a la protección de los humedales que hoy están pendientes en Chile y que resultan más urgentes de enfrentar?

Nuevas leyes, normas y ordenanzas siempre serán bienvenidas, pero a nuestro juicio lo más urgente es disminuir la brecha que existe entre las ya existentes y su aplicación efectiva. Existen muchas que en teoría pueden aportar significativamente, pero no se aplican correctamente, especialmente en materia de fiscalización, lo cual hoy es crítico. Esto nos parece urgente, pues en nuestra experiencia vemos que además de la presión de la expansión urbana descontrolada, actividades más cotidianas como perros asilvestrados, depósito de escombros, robo de agua, contaminación, ingreso de vehículos, entre otros, son las amenazas más habituales y difíciles de controlar.


Si las instituciones que deben velar por el cumplimiento de estas normas no pueden hacerlo por falta de recursos (que es lo que más escuchamos), entonces una vía de solución inmediata puede ser facilitar que las comunidades puedan tomar un rol en la vigilancia, pero para esto hay que mejorar los canales de comunicación con las autoridades, simplificar los procesos de denuncia, democratizar la información y lo más importante, abrir espacios de participación no solo de consulta. 

 
-La Fundación partió en Algarrobo y, por encima de cualquier factor circunstancial, con evidente lógica y sustento considerando que la comuna tiene gran riqueza en humedales. Hace pocos meses el término de la elaboración del expediente técnico para la protección de El Membrillo, humedal especialmente querido por los vecinos, fue recibida con gran satisfacción. ¿Qué tan cerca de su protección definitiva se encuentra hoy el humedal El Membrillo?

Actualmente, se está iniciando el proceso destinado a impedir el avance inmobiliario sobre este humedal y El Yugo. Esto se inició el año pasado, gracias al apoyo de la comunidad, que reunió mediante un bingo los recursos necesarios para pagar los honorarios de expertos que participaron de la elaboración del expediente. En paralelo, junto con el Departamento de Medio ambiente de la Municipalidad y la Seremi de Medio Ambiente de la región, estamos avanzando en el trámite para la declaración de humedal urbano en espera de que se publique el reglamento que permitirá la aplicación de esta nueva figura. 


Independiente de estos importantes avances que tenemos que celebrar, no hay que perder de vista que la conservación es una tarea permanente y que quedan pasos por dar, como el tener una gobernanza sólida en torno a los humedales y una protección del patrimonio natural en general para la comuna. También, fomentar la educación y la valoración de estos lugares, dotar de infraestructura apropiada y tener una mayor fiscalización.   


El Membrillo ha sido uno de los proyectos más complejos que hemos desarrollado. Su caso es un claro ejemplo de la necesidad de nuevas herramientas para la protección de los humedales. Se ha hecho de todo: denuncias en Contraloría, FPAs (Fondos de Protección Ambiental); se inició el trabajo en la postulación como Santuario de la Naturaleza; iniciativas de educación, difusión y participación de vecinos y vecinas, con importantes resultados. Pero hasta ahora, a pesar de todos los esfuerzos, no hemos logrado asegurar su protección definitiva. Es por esto que los avances recientes son tan relevantes, pero aún nos queda camino que recorrer.    

María José Domínguez, nueva directora ejecutiva de Fundación Kennedy: "Lo más importante es abrir canales de participación ciudadana, no solo de consulta" | Humedal El Membrillo junto a Peter K y Colaboradores de FK | Litoral Poeta |
María José Domínguez, junto a Peter Kennedy, el biólogo Carlos Medina y parte del equipo de colaboradores de la Fundación, en Humedal El Membrillo.

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