En una célula de mi ombligo encontré infinitas galaxias. Dentro de una de ellas había un mundo como la tierra. Así que emprendí un viaje al centro de ese micro planeta. << comprendí que la oscuridad es más rápida que la luz >> ¡Eureka! Había vida desarrollada! Para ellos mi cuerpo era el límite del universo. Les dije que era su Dios. Y que me alimentaba bien, así que estaba en expansión. Pronto fui al grano: les pedí que cambiaran sus hábitos; porque se estaban transformando en un cáncer para el cuerpo… >> tiempo << …Ya les conté que soy solo una micro parte de Dios, y que ellos son parte de algo más extraordinario. Suena todo tan extraño, tan humano. No sé si alcance a convencer.